Ya se publicó "AMANECER", que por cierto, fue una presentación preciosa. Lo fue sobre todo por la gran audiencia, por la cantidad de amigos que estuvieron presentes en el nacimiento de esta criatura, aportando su cálido afecto, su amistad incondicional y apoyo para todo lo que yo escribo. Fue un día inolvidable y quiero dar las gracias a todos aquellos con los que comparto un gran afecto.
Aprovecho para describir un momento de ese viaje fantástico en un mundo precioso de
"AMANECER".
Miré entonces a Laura y quedé prendida en la ternura de aquellos ojos. Ella me miraba y sonreía, pero no decía nada. Entonces entendí de donde provenía la luz y la belleza de aquel lugar. Era algo misterioso por el momento, que emanaba de todas partes. Supe por qué el cielo estaba mucho más cerca y por qué la luz era extraordinaria. También entendí la razón de las estrellas que se dibujaban en la cúpula azul tan próximas, que formaban parte de la ciudad como si fueran farolas. También los colores eran mucho más bonitos. Los sentimientos más cálidos y los pensamientos más alegres. Entonces comprendí que aquella era la fuente de donde nacía todo y formaba parte de algo sublime. Confirmé la grandeza de su mirada. Me quedé quieta mirando sólo aquellos ojos, para recrearme y considerarme una minúscula partícula de aquel sueño hecho realidad.
María
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