sábado, 23 de junio de 2012

EL BUEN PASTOR... DE FRANCISCO QUINTANA

julisantiago worsdpress

A Miguel Hernández

Eras niño de nardos y azucenas
prendido a resplandores siderales,
humilde y generoso a manos llenas,
difícil de encontrar entre mortales.

Eras pastor curtido en muchas penas
y pocas alegrías terrenales,
volcán tu sangre en gélidas arenas
y frágil cuerpo a pérfidos puñales.

Tus versos, alegría del rebaño,
pintaban la hermosura y transparencia
a vivas aguas de inmortal paisaje.

Pastor, que nunca a nadie hiciste daño,
cómo crucificaron tu inocencia,
mas no tu amor de riesgo y de coraje.

Francisco Quintana

2 comentarios:

Mary dijo...

Bonito homenaje SI SEÑOR¡¡¡

Feliz verbena para todos¡¡¡

Un beso

Luis dijo...

Este poema hace honor a los versos del malogrado poeta. Nunca los hombres dejan de equivocarse.
Precioso Quintana.
Saludos