lunes, 21 de junio de 2010

NANA A UN NIÑO SIN SOSIEGO....DE FRANCISCO QUINTANA.


tarotistas.com


HOY TENGO GANAS DE VER UNA NANA. DIRÍA QUE TENGO NOSTALGIA DE TENER UN CUERPECITO EN MIS BRAZOS. ASPIRAR ESE AROMA QUE TIENE EL AMOR MÁS DULCE DEL MUNDO.

PLASMARÉ PARA VOSOTROS ESTE POEMA DE NUESTRO YA CONOCIDO FRANCISCO QUINTANA.

Duérmete, mi vida,
duérmete, mi cielo,
y a la inmensa noche
no le tengas miedo,
que una blanca luna,
besando luceros,
ríe para ti
desde el firmamento.

Los ruidos del campo
van amorteciendo
y sólo se escuchan,
distantes, los ecos
de voces que calman
el rebaño inquieto.

Duérmete, mi amor,
y viaja muy lejos,
creciendo en bondad
por los universos
donde resplandezca
la flor de lo eterno.
Llévala contigo
cuando estés despierto,
sin que te la robe
el ogro del tiempo,
al acecho siempre
del valor de dentro,
porque lo de fuera
lo obtiene sin precio.

Duérmete, mi rey,
candor de mi anhelo,
pues vela tu madre
en dulce silencio,
esta noche azul
plena de recuerdos,
que cobijarán
al futuro incierto.

El niño, cansado,
y esclavo del sueño,
oyendo a la madre
tierno canturreo,
entorna los ojos,
se aprieta a su pecho,
la mira, sonríe...,
y se duerme luego.


Francisco Quintana.

4 comentarios:

Mary dijo...

Es muy bonita,ademas es cierto que despierta la nostalgia de un pequeñin recien bañadito.

Como siempre Maria,GRACIAS POR COMPARTIR¡!

Un beso.

Luis dijo...

Yo de poemas he leído poco, aunque reconozco el valor de un buen verso.
Este es una nana bonita, bien construida, se nota que sabe el autor de poesía.

Seguiré con Saramago a tenor de lo desconocido que es para vosotras. Si leeis
"ENSAYO SOBRE LA CEGUERA", no dejeis a continuació de leer "ENSAYO SOBRE LA LUCIDEZ", este nos alerta del peligro que supone la manera en que los políticos desilusionan al pueblo con sus comportamientos.
No se si tomarán nota, porque buena falta nos hace.
Saludos.
Luis

Olga dijo...

Muy bonita,SR. Quitana.

Mis conocimientos sobre poesía, son escasos,pero me ha parecido entender,que recomienda que conservemos la bondad y la ternura que de niños poseemos y con los años algunas personas perdemos.

Los viejos que tienen alma de niño sin duda son mas felices.

María gracias por hacernos la vida más agradable.

Un saludo para todos/as.

Asun Aguilera dijo...

¡Que bien escibe este hombre!
Es una nana preciosa. Invita a estar despiertos.