domingo, 6 de septiembre de 2020

UNA OJEADA A LA VIDA... DE AURELIA GARCÍA...



                                                                sabersinfin.com

Notaba en mi ser, un nuevo crisol.

No sé lo que en mi interior nacía.

A pesar que, lo que en mi alma crecía

le hacía mil sombras, al vasto sol.

Y el ocaso, en su orto dorado, sonriente

se proyectaba en mí, atónitos los ojos.

De mi cara se escapaban mis enojos

alisando como pétalos mi frente.

¡Había tanta paz… tanta y sin medida!

en el discurrir de mi sangre era evidente,

en los pliegues de mi faz estremecida

se tornaban mis gestos elocuentes.

Ya, sintiéndome alegre, alienada…

dirigí mi mirada hacía las rosas.

miré a mi entorno con la mirada anegada

y me hablaron de existencia… las cosas.


Volaba la mariposa hasta perder el aliento

y posarse bella y graciosa en una flor.

Corría el gamo ligero contra el viento

a la búsqueda de un pasto mejor.

Por doquier hay expresión de vida

se muestra con coraje y furor.

Pero… ¡Ay del hombre! no la cuida…

Etiquetado como loco depredador.


Auri

3 comentarios:

Maria Naranjo dijo...

Auri, artífice de la rima, de pequeñas historias que dentro de una realidad emiten belleza, una belleza que nos deleita.

Luis Arranz dijo...


Muy bonito, Auri. Has construido imágenes, metáforas... que le dan al poema un brillo especial.

Luis

Auri dijo...

Gracias amigos, compañeros de A Trenc d'Alba, María, Luis.