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NUESTRA POETA CONOCIDA ACABA DE LLEGAR. HACÍA TIEMPO QUE NOS HABÍA ABANDONADO UN POCO AL OTRO EXTREMO DEL PAÍS. PARA DARLE LA BIENVENIDA, COMPARTIRÉ HOY CON VOSOTROS UNO DE SUS POEMAS.
FUE EN GRANADA.
A FEDERICO GARCÍA LORCA.
Granada fue la elegida
para el gran alumbramiento.
Ella fue quien dio la vida, al maestro
de maestros.
En su pluma ponía alas, mientras
con ella escribía
y en sus versos pregonaba
lo que decir no podía porque a otros
molestaba.
Sobre el papel, inclinado,
luchó por la sinrazón.
Defendió a negros y a blancos.
También le cantó al amor.
Arrastraron a las masas
sus versos de boca en boca
mientras la fiera acechaba, agazapada
en la sombra.
Granada lo vio crecer
y vio como su verdugo
le dio con zarpa cruel
y Granada, su Granada sólo pudo
llorarle y enmudecer.
El llanto en Fuente Vaqueros
fue grande por Federico
pero pronto vio el regreso
por los siglos de los siglos
porque lo que no pudieron
fue arrebatarle su espírito.
Y dicen que por las calles en las noches
de "Graná"
su sombra de ronda sale.
Hasta el Albaicín se va
y entre el embrujo y el arte, su voz se oye recitar,
para que el gitano baile y ría en vez de llorar.
Las aguas del río Darro
aumentaron su caudal por el llanto
derramado.
La alhambra perdió esplendor
y hasta los blancos jazmines,
vistieron negro el color
llorando por los jardines,
cuando el poeta murió.
Pero aunque se fue el poeta
su verso siguió volando.
Ha traspasado fronteras
y al mundo está deleitando
porque lo escrito se queda,
aunque nosotros marchamos.
Ana Medina
María
2 comentarios:
Este poema lo dice todo,preciosas letras dedicadas a un Maestro...Ana Medina,te salio del Alma trasmite mucho AMOR...PRECIOSO.
Como siempre muchas gracias Maria por compartir.
Un beso.
Sigue escribiendo Ana, dices cosas muy bonitas.
Abrazos para todos.
Sol
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