martes, 12 de marzo de 2019

FELIZ CUMPLEAÑOS LAURA...



                                               Ni la más bella flor es tan bonita


Después de los años vividos,
vividos con tanto amor,
yo puedo ver tu figura
hermosa como una flor.

Muchos años ya, y el viento,
entre susurros me trae, 
tu siempre querida voz.

Hoy escucho balbuceos
que me llegan de aquel día,
que radiante como el sol
tú conmigo te fundías.

¡Hay!, mi rallito de sol,
que poco duró la dicha.
El tiempo se nos volaba
y se escapó sin control.

Soledad, después de ti
ya todo quedó a oscuras,
la luz cambió sus reflejos
y todo se volvió gris.

Pero, no quiero seguir,            
quiero volver a aquel día,        
que tenía olor a estrella,       
a tomillo y hierbabuena.
A rosas de mi jardín.

Revivir esos momentos
a mí me invita vivir,
sentir mi sangre inundada,
solo si te siento a ti.

María



amorfm.mx


Van pasando los días, y aunque haga mucho tiempo aún siento tu calor. Es un calor amable, un calor que me abraza, me protege y me da fuerzas para mirar al sol cada día. Me levanto y puedo dar gracias allí arriba donde estás tú. Gracias por haber venido a mí tal día como hoy, gracias por haberme sonreído, por el privilegio de ser tu madre.
Sé que la vida es un regalo, no sabemos de cuánto tiempo, a veces, como el que ahora nos ocupa, demasiado corta. Eso deja un hueco grande dentro del pecho. Luego llegas tú, que no sé como lo haces, pero vienes y me transformas, me regalas esa chispa de la vida. A veces, los aromas me envuelven y siento que estás cerca, y para mí son música de violines. Eso también es vida, la vida que compartimos de una manera especial.
Ese misterio creo que no es muy entendible, si no lo experimentas, si no sientes el abrazo del amor eterno, ese que acompaña cada minuto, que cada hora te lleva de la mano. Ese que te hace llorar por dentro y reír por fuera. Ese que te hace sentir que eres dueña del mundo, pero del mundo bueno, de las cosas entrañables, buscando siempre esa paz que lo hace todo más sencillo y amable.
Vivimos vida mía en un lugar inventado por las dos, un lugar propio y privado, donde puede entrar cualquiera, pero solo si lo desea. En este lugar podemos vivir con alegría, sin miedos que acechen, sabiendo que todo es posible y que, lo irremediable tampoco coartará los deseos de seguir caminando.
Te miro con los ojos del alma para decirte:

FELICIDADES LAURA.

Siempre tuya.

María



2 comentarios:

Aurelia García dijo...

Nunca hemos hablado de tu hija. Pero me doy cuenta de que tú le has prestado tu ser, para que viva eternamente en ti. Un abrazo.

Maria Naranjo dijo...

Quien sabe leer, sabe entender los sentimientos.
Gracias, un abrazo para ti.